Al principio de la primavera pasada, el Wall Street Journal publicó un artículo investigativo sobre Tether, Bitfinex y compañías relacionadas. La mayoría de las acciones tanto de Tether como del intercambio Bitfinex son propiedad de iFinex, una corporación establecida en las Islas Vírgenes. En ese momento, el Wall Street Journal afirmó que las dos compañías, junto con una serie de empresas ficticias más pequeñas relacionadas con los negocios de criptomonedas y sus ejecutivos, emplearon métodos cuestionables para mantener sus conexiones con el sistema bancario internacional.
El artículo afirma que el grupo de entidades que rodean a iFinex intentó mantenerse al tanto de la situación abriendo cuentas conectadas a hombres de negocios que ya tenían reputación. Sin embargo, los nombres de las empresas utilizadas fueron cambiados por motivos de imagen. “En Taiwán, las cuentas estaban a nombre de Chrise Lee, un ejecutivo de Hylab Technology Ltd., que fabrica decodificadores de televisión. Pero las cuentas se abrieron a nombre de Hylab Holdings Ltd., según documentos.”
En última instancia, las cuentas vinculadas a Tether y Bitfinex a menudo terminaron en problemas con varias investigaciones, ya sea relacionadas con el financiamiento del terrorismo o con delitos financieros más comunes, lo que le costó a las empresas bastante a largo plazo.
La mayor pérdida, según el artículo, fue el resultado de un decomiso de fondos de $850 millones vinculados a la empresa de procesamiento de pagos con sede en Panamá, Crypto Capital Corp, por parte de las autoridades. Se cree que estos fondos estaban relacionados con Tether a pesar de la falta de documentación formal de la relación. Otra empresa que el artículo alegaba que estaba infringiendo una conducta financiera adecuada es AML Global Ltd., propiedad del empresario británico Christopher Harborne, quien posee casi el 13% de la empresa emisora de Tether. AML Global fue señalada en el artículo como una entidad que se involucró en malas prácticas en nombre de iFinex.
Harborne ha llevado a Dow Jones & Company, la empresa matriz del WSJ, a los tribunales en Delaware por el asunto, acusando al equipo de difamación. El Wall Street Journal ha retirado la parte del artículo que acusaba a Harborne y su empresa de cualquier mala conducta. Aunque Harborne no niega ser accionista, refuta ocupar algún cargo ejecutivo en la empresa, así como las acusaciones de actividades ilícitas, y afirma que las acciones fueron adquiridas como resultado de un plan de reembolso de Bitfinex después de un hackeo en sus primeros días.
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