El ámbito de la ciberdelincuencia ha experimentado una tendencia preocupante en los últimos tiempos, con la cantidad de fondos robados en estafas de criptomonedas casi duplicándose de $857 millones a $1.58 mil millones a finales de julio. Este incremento sustancial señala una creciente amenaza para individuos y organizaciones involucradas en el espacio de las criptomonedas.
Además, los pagos de ransomware también han mostrado un aumento, alcanzando los $459.8 millones a mediados de año 2023 en comparación con los $449.1 millones en el mismo período de este año. Estas alarmantes cifras sugieren que 2024 podría convertirse potencialmente en un año récord para los ataques de ransomware.
A pesar de este significativo aumento en los activos robados, el número de incidentes de piratería solo ha experimentado un modesto aumento del 2.76% interanual. Sin embargo, el valor promedio comprometido por incidente ha aumentado drásticamente en un 79.46%, pasando de $5.9 millones por evento en la primera mitad de 2023 a $10.6 millones por evento en 2024.
Según Chainalysis, los criminales parecen estar volviendo su atención a los intercambios centralizados después de años de centrarse en contrapartes descentralizadas. Esta cambio de estrategia ha venido acompañado por el uso de tácticas avanzadas de ingeniería social, como solicitar empleos de TI para vulnerar estos intercambios.
Los pagos de ransomware han estado en aumento, con 2024 potencialmente perfilándose como el peor año en la historia. A pesar de las interrupciones causadas por amenazas cibernéticas como LockBit y ALPHV/BlackCat, la actividad de ransomware ha persistido.
El panorama de las amenazas cibernéticas está evolucionando rápidamente, con fondos robados y ransomware mostrando picos preocupantes en actividad. A medida que los ciberdelincuentes adaptan sus tácticas y apuntan a entidades de alto valor, es crucial que individuos y organizaciones refuercen sus medidas de seguridad y se mantengan vigilantes contra estas crecientes amenazas.
Deja una respuesta