El colapso de FTX ha desencadenado una batalla legal por millones de dólares en activos confiscados del ex CEO Sam Bankman-Fried (SBF) y otros ejecutivos de FTX. Los activos en cuestión van desde aviones hasta acciones de Robinhood e incluso contribuciones políticas vinculadas a los ejecutivos de FTX.
Esto ha provocado una disputa entre múltiples partes que buscan controlar los activos confiscados, con deudores de FTX y su filial bahameña, FTX Digital Markets, presentando una petición en la Corte del Distrito Sur de Nueva York para reclamar estos activos. Argumentan que los fondos deberían utilizarse para pagar a los acreedores, brindando una mejor recuperación que el plan de quiebra actual.
Al mismo tiempo, se ha presentado una petición separada por un grupo de clientes de FTX, representados por los conocidos abogados de criptomonedas Adam Moskowitz y David Boies. Los clientes argumentan que los activos confiscados deberían ser devueltos directamente a ellos, evitando por completo el proceso de quiebra.
Una de las clientes, Sunil Kavuri, testificó en contra de SBF durante el juicio y también es un acreedor que se opone al plan de reorganización. Afirman que Bankman-Fried les robó sus activos digitales y, por lo tanto, los fondos pertenecen legítimamente a los clientes. El juez Lewis Kaplan aún no ha tomado una decisión sobre ninguna de las peticiones, dejando la situación en un estado de incertidumbre.
Se espera que la batalla legal por los activos confiscados sea compleja, con ambas partes presentando argumentos sobre la legitimidad de sus reclamos y la mejor forma de recuperar los fondos perdidos. La decisión del tribunal sobre la confiscación de activos tendrá implicaciones no solo para los clientes de FTX, sino también para el ecosistema criptográfico en general.
El resultado de este caso podría potencialmente impactar las tasas de recuperación para las víctimas y dar forma a los efectos a largo plazo del colapso del intercambio en la industria de criptomonedas. Mientras la batalla legal por los activos confiscados se desarrolla, el caso de quiebra general que involucra a FTX continúa. Los acreedores como Kavuri han expresado preocupaciones sobre el plan de reorganización propuesto, agregando otra capa de complejidad a la situación.
Además, aún está pendiente la sentencia para otros antiguos ejecutivos de FTX que cooperaron con los fiscales, incluyendo a Caroline Ellison y Gary Wang. La resolución de este caso será monitoreada de cerca por todas las partes interesadas involucradas, ya que podría tener consecuencias de gran alcance para el futuro de la industria de criptomonedas.
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