En un movimiento significativo que muestra la ambición del Reino Unido por liderar en el ámbito de la innovación financiera, la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) y el Banco de Inglaterra han lanzado la siguiente fase de su Sandbox de Valores Digitales (DSS). Esta iniciativa señala un compromiso para explorar e implementar la tecnología de libros distribuidos (DLT) y valores tokenizados, redefiniendo así la forma en que se pueden realizar transacciones financieras dentro de los mercados tradicionales.
El DSS operará hasta diciembre de 2028 y, a través de este entorno estructurado, las empresas tendrán la oportunidad de experimentar con aplicaciones de DLT, las cuales prometen mejorar la eficiencia del mercado, aumentar la transparencia y fortalecer la resiliencia del mercado en general.
El Sandbox de Valores Digitales está diseñado meticulosamente de manera escalonada, permitiendo a los participantes aumentar sus actividades de manera progresiva a través de distintas etapas o «puertas». Este enfoque innovador garantiza que, a medida que las empresas avancen, comenzarán a participar en actividades más complejas relacionadas con la emisión, negociación y liquidación de valores digitales tras la finalización de la Puerta 2.
Es importante destacar que los valores digitales emitidos dentro de este sandbox están diseñados para operar de manera similar a sus contrapartes tradicionales, lo que los hace prácticos para su uso en diversos instrumentos financieros, como acuerdos de recompra y contratos derivados. Los activos elegibles dentro de este marco son diversos, abarcando acciones, bonos corporativos y gubernamentales, instrumentos del mercado monetario, unidades de fondos y permisos de emisiones.
Al estar abierto a una amplia gama de participantes, que van desde instituciones financieras establecidas hasta nuevos entrantes en el mercado, el DSS se erige como un faro para la innovación en el sector financiero del Reino Unido. Reconociendo la importancia de la adaptabilidad en las prácticas regulatorias, la FCA y el Banco de Inglaterra publicaron recientemente la Declaración de Política PS24/12. Este documento describe el enfoque final de política adoptado tras un exhaustivo proceso de consulta con las partes interesadas de la industria y refleja varios cambios clave diseñados para mejorar el alcance y la flexibilidad del DSS.
Notablemente, la inclusión de activos no denominados en libras esterlinas amplía el atractivo del DSS a un público más amplio, atrayendo así a más empresas a participar en el sandbox. Además, el enfoque para establecer límites específicos ha cambiado de límites fijos a rangos más dinámicos, lo que debería facilitar una experiencia más personalizada para las empresas que transitan hacia la etapa de implementación.
Significativamente, la reducción del requisito mínimo de capital para un Depósito de Valores Digitales (DSD) implica un punto de entrada más accesible para posibles participantes, ya que el umbral estipulado ha pasado de nueve meses de gastos operativos a seis. A medida que las empresas consideran la participación en el DSS, es vital que revisen la guía proporcionada y cumplan con los requisitos de solicitud, sabiendo que las aplicaciones se extenderán hasta alrededor de marzo de 2027.
Durante este período, un esfuerzo concertado tanto de los organismos reguladores como de las empresas financieras será crucial para sentar las bases para una posible transición a un régimen regulatorio más permanente en relación con estas nuevas tecnologías.
El DSS emerge como una oportunidad transformadora para aprovechar la tecnología blockchain y tecnologías similares en los mercados financieros del Reino Unido. Encierra un doble objetivo: fomentar la innovación mientras se aseguran los principios perdurables de estabilidad financiera e integridad del mercado. Este delicado equilibrio es crucial, ya que subraya la intención estratégica del Reino Unido de aprovechar los beneficios del avance tecnológico sin sucumbir a los riesgos que pueden acompañar tales cambios rápidos.
A pesar de la naturaleza prometedora del DSS y su potencial para revolucionar los procesos financieros, es crucial reconocer que el enfoque del Reino Unido hacia la DLT no se traduce automáticamente en un desvío hacia los ideales descentralizados a menudo asociados con las tecnologías Web3. Más bien, la iniciativa ejemplifica un enfoque pragmático y medido hacia el futuro de las finanzas, enfatizando los beneficios de la innovación regulada.
Este emprendimiento en valores digitales representa un capítulo crucial en la evolución de la tecnología financiera dentro del Reino Unido. A medida que el panorama cambia, los interesados deben permanecer vigilantes, asegurándose de que los objetivos compartidos de eficiencia, transparencia y resiliencia no solo se envisioned, sino que se hagan realidad de manera efectiva en los años venideros.
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