En un incidente reciente, un inversionista de criptomonedas anónimo utilizando el nombre de usuario «Vender Cuando Supere» en una plataforma no especificada sufrió una pérdida devastadora de $800,000. El inversionista notó inicialmente una pérdida significativa de $500,000 de múltiples aplicaciones de billetera y sospechó de juego sucio.
El inversionista planteó preocupaciones sobre un posible ataque a través de dos extensiones sospechosas del navegador Google Chrome que aparecieron en su navegador. Esta revelación llevó a una investigación más exhaustiva, que finalmente reveló la extensión de la vulnerabilidad y la pérdida total de $800,000. Después de la actividad sospechosa, el inversionista descubrió que todas sus pestañas habían desaparecido y que los inicios de sesión de sus extensiones se habían restablecido después de una actualización obligatoria de Windows que forzó un reinicio del sistema.
Posteriormente, el inversionista tuvo que volver a ingresar manualmente todas las credenciales en Chrome y volver a importar frases de semilla para sus billeteras de criptomonedas desde un dispositivo seguro separado. El usuario sospechaba que un keylogger comprometió su información sensible, lo que resultó en la pérdida de fondos. A pesar de no notar ningún comportamiento anormal en su navegador inmediatamente después del reinicio, el inversionista identificó dos extensiones sospechosas: «Prueba beta de sincronización» y «Juego Simple», confirmando que la primera era un keylogger. En retrospectiva, el inversionista admitió que este costoso error le sirvió como una valiosa lección. Advirtió a los demás que estén atentos y tomen medidas inmediatas si algo parece sospechoso, especialmente si se les pide ingresar una semilla. El inversionista enfatizó la importancia de medidas de seguridad exhaustivas, sugiriendo una eliminación completa de la PC en caso de actividad sospechosa.
Como resultado de este brecha de seguridad, los atacantes lograron transferir los fondos robados a dos intercambios: MEXC en Singapur y Gate.io en las Islas Caimán. La confianza del inversionista en su navegador se vio afectada, destacando la necesidad de una mayor conciencia y protocolos de seguridad en el siempre cambiante panorama de las inversiones en criptomonedas.
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